En cuanto llega la primavera, este tipo de dolencias se vuelven mucho más molestas. Y es que, como es natural en esta época del año, el clima es cambiante y ello hace que nuestro cuerpo lo note.
Vamos a hablar un poco de ambas. Mientras que la artritis es una inflamación que afecta al tejido que recubre el interior de las articulaciones, la artrosis es una enfermedad que consiste en la degeneración del cartílago que recubre la superficie ósea de la articulación.
La artritis se produce por un estado de inflamación provocado por varios factores: estrés, ansiedad, emociones atrapadas, mala alimentación, falta de descanso, etc.
Ambas son muy dolorosas y todo el que las padece lo sabe. Según me cuenta Sabina Calatayud, debes saber que en Sinthesis Salud podemos ayudarte a mejorar ambas. Y siguiendo sus recomendaciones te cuento:
Hay dos actitudes: una es seguir dependiendo únicamente de un tratamiento farmacológico y otra, ayudarnos a la vez con nuestra actitud consciente y con una serie de cuidados que nos ayudarán a mejorar nuestras dolencias.
Cuando el dolor es muy profundo y crónico, te recomiendo aplicar el Elixir Origen, en primer lugar, en una zona dolorida o inflamada. La célula no dispone de energía para sanarse. El Elixir Origen actúa como si le hiciésemos un electroshock a la célula y con ello conseguimos restablecer su equilibrio. Después aplica el Aceite Origen que es antiinflamatorio y calmará la zona inflamada. A continuación, aplica la Crema Calmante y cubre la zona con un apósito.
Es recomendable que tomes dos cápsulas diarias de Osto Adapt, una después de comer y otra tras la cena. Las plantas empleadas en su composición desactivan el sistema inflamatorio, logrando la formación articular con el Ácido Hialurónico.
También te ayudará la Hidroterapia. Puedes hacerte baños para manos y pies añadiendo sal marina al agua caliente, comprobando que hay un punto de saturación en el que aquella ya no se disuelve. Entonces añadimos justo la mitad de bicarbonato y unas gotas de Aceite Calmante, con ello conseguimos que la piel no quede tan tirante. Tras el baño es aconsejable que no te limpies la sal; te secas y pones unos guantes o calcetines de algodón y te metes en la cama. Seguro que tu despertar será muy distinto.
En cuanto te levantes al día siguiente, prepárate un vaso de agua caliente con el zumo de medio limón y una cucharada de bicarbonato. Esto ayuda a alcalinizar tu cuerpo. Una dieta alcalina es lo que se necesita cuando estas dos afecciones forman parte de tu día a día.
Yo te aconsejo que en tu desayuno no estén incluidos los lácteos, los azúcares ni las harinas refinadas. Sé que puede resultar contradictorio con todo lo que siempre hemos escuchado, pero debes saber que es mejor evitar este tipo de alimentos, ya que acidifican nuestra sangre y es justo lo contrario lo que queremos conseguir.
Nuestro Batido Esencial Vida tanto de frutas como de chocolate es una muy buena opción. Puedes prepararlo con una bebida vegetal. Ayuda muchísimo en estos procesos y a la vez es un gran aporte de energía y vitalidad y te saciará durante toda la mañana.
El resto del día deberías continuar con la dieta alcalinizante, esto quiere decir que evites la carne. Tanto ésta como el pescado y los productos lácteos son metabolizados de forma ácida, al igual que las pastas y los productos a base de cereales no integrales.
El queso en particular, incluyendo especialmente los añejos y duros, así como el queso fundido, posee un elevado nivel de acidez. Los aceites son alimentos neutros. Las verduras y las frutas se cuentan entre los alimentos con efecto alcalino. El hinojo y la espinaca, por ejemplo, presentan valores bastante altos.
No obstante, si estás pasando por un brote de dolor agudo, puedes recurrir a una dieta de choque durante nueve días. Esta consiste en tomar solo verduras, frutas y nuestro maravilloso Batido Esencial Vida. Con ello conseguirás alcalinizar el cuerpo mucho más rápido, bajar la inflamación y con ello el dolor.
Al fin y al cabo somos lo que comemos.
Debes tener en cuenta que tu artrosis o artritis te están diciendo que te pares y te escuches, que no te sientas egoísta por hacer aquello que te gusta.
Ayúdate a ti mismo practicando meditación o yoga. Ambas técnicas harán que tomes mayor conciencia de tu cuerpo y de su estado físico, mental y espiritual.
No olvides que tu cuerpo es tu templo. Nadie como tú sabe lo que realmente necesita: escúchalo, atiéndelo. En definitiva, mímate y quiérete.
Si necesitas más información o tienes dudas sobre todo lo comentado, no dudes en consultarnos. Estaremos encantadas de ayudarte en el proceso de mejora y cambio en tu calidad de vida.
Espero que todo lo que te he contado sirva para cambiar una mueca de dolor por una maravillosa sonrisa.